Con sueño y cansado

Sí, quizás esa sea la razón por la que ayer rompí mi ritmo de entrenamientos semanales... o quizá se mezcló con otras cosas de índole familiar o desgana o...

El caso es que, al salir de trabajar, no tenía mucho ánimo para ponerme la ropa, las zapas y salir a correr, que había programado un trote cortito, de 40 minutitos o incluso menos... pero no, no me apetecía mucho. Y luego pensando en que había que bañar a los peques, ponerlos a dormir y todo eso... viendo a mi mujer...

Ya he comentado un par de veces que lo mejor es dejarse llevar por las sensaciones y escuchar al cuerpo... y a mí, mi cuerpo, me pide dormir y descansar más. Estos días incluso me encuentro cansado en el trabajo; no me duermo, pero casi (jeje). También ayuda a que me paso el día delante del ordenador en mi silla, por eso corro, para desentumecer este "cuerpazo".

Desde luego no ayuda el tener un bebé de 8 meses, que te rompe el sueño en dos momentos cada noche. Y menos aún dormir entre 6 y 7 horas cada día... debe ser esto último... con lo bien que iba yo con mis 8 horas diarias de sueño.

Bueno, ES LO QUE HAY, desde luego no hay vuelta atrás.

Como hoy es viernes y toca hacer la compra semanal, hasta el sábado, en la Carrera de Carballiño, no volveré a correr. ¿Objetivo? nunca me gusta marcarlo, aunque últimamente ando bastante acertado. Es un recorrido llano de 7.800 m, con lo que, si mis últimos entrenamientos dan fruto y no tengo molestias (que ahora mismo no las tengo y no tienen por qué aparecer, ¡concho!), debería correr por debajo de 38 minutos pero, siendo realista... mejor entre 38 y 39 minutos.